lunes, octubre 26, 2009

26 de octubre


Este 26 de octubre no tendría por que ser un día especial a no ser por ellos, por que muy a pasar de cualquier cosa, amaneció oscuro como cualquier día de octubre, y la gente mostró un extraño positivismo por ser este día un lunes en el que se agolpan los buenos deseos y proyectos laborales, que en la mayoría de casos, se irán diluyendo con los días en la misma pista monótona que consume todo en rutina y pereza.
Sin embargo, y a pesar de que el tránsito amaneció estancado de nuevo, como cada mañana, y que los periodistas deportivos llenaron de estupideces el dial hablando de la jornada de el día anterior, para ellas este no era un día cualquiera, los niños se pasaron media hora antes de que sonara el reloj a nuestra cama e hicieron que te levantaras a hacerles desayuno, se bañaron y se prepararon para la escuela y la guardería, mientras tu de forma rápida, mas no descuidada te arreglaste para la oficina.
Hace un año apenas aprovechábamos la mañana de domingo, y yo mientras bañabas a los niños, me desayunaba un cigarrillo en el balcón, ese 26 de octubre, domingo de el año anterior, tampoco fue un día distinto, fue un domingo como cualquiera, yo leí el periódico y mientras te ayudaba con el almuerzo ojeaba el futbol, aunque el detalle de nuestras miradas cómplices y picaras por la noche anterior fue un ingrediente distinto en la rutina, reíamos y nos mirábamos con pasión y chispeante picardía como la de cuando nos conocimos, no hace lejanos octubres; y es que la noche anterior al ritmo de los doors y nuestros sudores y cuerpos, nos sorprendió la madrugada de este 26 de octubre común y corriente.
Ha transcurrido un año y mi pequeño es cada día más vivaz y terrible, mientras mi pequeñita se acerca mas y mas a su pre adolescencia, y trato de reconocer a la bebé cachetoncita que encontré en una foto arriba en ella; tu en cambio eres la misma; un poco mas vieja, apenas un poco mas seria como aquella mañana normal de aquel domingo 26 de octubre que hoy amaneció lunes, y de pronto me parece que ambos días son el mismo, como si un suspiro fuera un instante y ese instante pudiera alargarse todo un año, recuerdo poco de ese día pero sé que fue un día como cualquiera, por que la gente muere todos los días y el hecho de que hoy este cumpliendo justamente un año de muerto, no cambia en nada el que hoy sea un día como cualquier otro 26 de octubre; a no ser por que ustedes no me olvidan, ni la promesa que les hice mientras esperábamos la ambulancia, de que todo saldría bien; y mi muerte como cualquier otra muerte normal no cambio el día de todos los otros que pasaron de largo e ignoraron el accidente con el carro mientras cambiaba una llanta, preparándolo para dar un paseo como cualquier otro paseo familiar de domingo que se trunca por algún imponderable de el destino.
--------------------------------------------
Hoy este blog cumple 3 años al aire a pesar de todo, hoy he vuelto gracias a ello y a quienes insisten en esta hora oscura para venir a lamerse las heridas... Gracias.
(esta vez no hay fiesta virtual ni nada, solamente estas letras y los comentarios que gusten dejar)

viernes, octubre 09, 2009

9-10-2009

El día en que cierres tus ojos

te vestiré con el kimono usado por la muerte

en las noches blancas y los días sucios,

como dijera Corbière,

quien amaba a la mar

–que es hembra-,

como la muerte

hembra que me gusta oírle callada.


...