lunes, septiembre 07, 2009

Muñeca.

-Qué hermosa muñeca han dejado tirada aquí- Pensó Don Gilberto al descubrir el cuerpo aún tibio de la apenas hace un año adolescente en medio de la basura sin recoger de el parque frente al instituto de seguros, tan pequeña y joven, tan inocente, tan llena de sangre, de sudor y de los jugos de las bolsas que se mezclaba con el agua de la lluvia de la reciente madrugada –Quién pudo haberla dejado olvidada?! Se pregunto irónica e inocentemente.Mas no reparo en mas cuestionamientos, con su carretillo y sus 70 años a cuestas tenía fuerzas aún con su miseria de dedicarse a recoger de la basura todo aquello que él pensaba podía servirle y que otros habían desechado, así que tomo cariñosa y cuidadosamente aquel cuerpo frágil e inerte y lo acomodo sin problemas en su carruaje oxidado y dispuso volver a casa con el tesoro encontrado.De los pocos que lo vieron camino a el oeste de la capital, hasta el puente bajo el que vivía, ninguno puso atención a su carga, ni al viejo decrépito e indigente que era paisaje habitual para quienes a esas tempranas horas se apuraban por llegar a sus destinos. San José aún dormitaba, y su conciencia era escasa a las seis de la mañana.-Esa ropa de putita no es digna de una muñeca como tu- le decía a el cadáver mientras lo desvestía y lavaba con el agua de el río en su tugurio de latas bajo el puente, la vistió cuidadosamente con un vestido a cuadros atrapado en le tiempo, milagrosamente bien guardado, milagrosamente entero, le arreglo la cara, el cabello, abrió campo en su destartalada cama en medio de todas las muñecas plásticas y la acomodo semi-sentada junto a las otras, obviando el olor a sexo añejo y desgarrador, se alejo hasta la puerta de plástico y sonrió mientras admiraba su colección hermosa; de todas formas en aquella miseria el olor era algo que no importaba. –Nos vemos en la noche muñecas!- dijo mientras tomaba su carretillo con rumbo a los basureros de San José. La Muñeca de carne dibujaba una sonrisa extraña que él le dibujo en la cara, finalmente alguien la veía como un tesoro, como una muñeca, a pesar de su muerte, aunque esa noche tuviese que resistir las caricias mal sanas del anciano.

20 comentarios:

GAlcidesS dijo...

No se si suyo o no, pero esto ya lo había leído en otro lado.

KagosaVampire dijo...

mmm que historia...

PD. de + el = del
para evitar cacofonia...

Amorexia. dijo...

Si mae, lo leíste en el desaparecido club de los noctámbulos, pero si es mio, de no serlo, se indicaria.

Kagosa, el "de el" es una licencia literaria que me he dado por puro gusto y maña y que además es una especie de firma en mis escritos, de igual forma la cacofonía es válida cuando se trata de dar ritmo a la lectura.

Gracias por comentar gente.

Deshora.

Marco Cañizales dijo...

Muy bueno, elemental. Cuanta gente estará lanzada en la basura por la indiferencia de los demás. No creo que exista tugurio lo suficientemente grande para juntar a tantos de nosotros y coleccionarnos.

pese a las caricias mal intencionadas de la noche, por primera vez la muñeca se sentirá querida.

Mario_ergosum dijo...

Muy bueno, eriza la piel al leerlo, como una extraña mezcla de realidad y pesadilla inunda el texto y lo corona en el final.
Siempre un gusto leerte.

Saludos...

Vergónides de Coock dijo...

La basura de la indiferencia, todavía no me convences; estaré regresando. Suerte.

Rolando Escaró dijo...

triste destino para una muñeca que vivia rota, física y espiritualmente

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Themys Brito dijo...

A veces son los que uno menos espera quienes dan el valor a las personas, por más sesgado que fuera.
Una escena horrorosa, y tus historias, como siempre... Intensas. Un saludo.

xwoman dijo...

los tesoros son distintos para todos. El disfrute del placer tambien es algo distinto en cada quien. La agonía y la belleza pueden ir de la mano.

Saludos.

Bar dijo...

Que muñeca tan bella. Saludos.

Morella dijo...

Exelente.

Renove aires. Fijate como me sienta el cambio.


Besos y vasos.

Cin dijo...

Seres humanos viven en basureros, y la muerte los desaparece, para evitarle a la cruz roja que se los lleve al Juancho.
Es una vida que se quiere ignorar.

Saludos Amorexico

Ricardo dijo...

es un poquito como leerse "Unica mirando al mar" hasta me imagine el mundo de basura ahi, pobre muñeca.. :S

que buen post.

Anónimo dijo...

Genial. Supongo que algunas munecas estan destinadas a este final, o este principio, segun se mire.

Abrazos y gracias por venir siempre a leerme.

maureen dijo...

siglos de no perderme entre las letras oscuras, nocturnas a deshoras, mezclando placeres y melancolias
saludos amigo amorexia
saludos a reina y tus bellezas caseras
cuidense

Recomenzar dijo...

Fabuloso no todos entienden lo que hay detrás de tus palabras es un canto a las letras mezcladas con el sudor que es vivir a diario
besos van

Cynthia dijo...

Corazón se que te debo leer este texto, pero como ando sensible la verdad que comencé a leerlo y no pude seguir, tus textos son fuertes y siempre me hacen flaquear y termino con lágrimas en los ojos, prometo que pronto termino de leerlo y gracias por tu eco en mi blog tan bien plasmado...

gracias de corazón.
muakkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkkk

Joy dijo...

Uy!!!, que cuentos escribes tú!!. Increíble!. Vaya que es así mismo casi todo, cuánto apreciamos muchos las cosas que otros desechan, y cuánto nos sirve entonces!.

Siempre que te leo me dejas con una sensación toda rara... que no sé explicar.

Saludos!

Recomenzar dijo...

Te extrañamos No podía abrir tu blog me alegro de poder seguir leyendo tus letras..
Saludos desde mí